Qué ver en un viaje a Copenhague

Lugares que ver en Copenhague
Hay una ciudad que emerge gradualmente de la campiña circundante. Es una ciudad pequeña, pero con la importancia de una metrópolis cultural. Así, el escritor contemporáneo holandés Peter Hoeg describe a Copenhague: un lugar a medida del hombre, que no tiene nada que envidiar a las grandes capitales europeas.
Hoy vamos a dedicar este artículo a Copenhague Dinamarca. Información sobre qué ver en un viaje a Copenhague, lugares turísticos que ningún viajero puede dejar de visitar en esta hermosa ciudad en el norte de Europa.

Copenhague capital de Dinamarca es una ciudad con historia gloriosa que se ​​muestra sin velos frente al viento que barre sus calles estrechas, resultado de la ausencia de los muros de protección del siglo XIX, y el encanto de la isla de Slotsholmen centro histórico de la ciudad: está última donde el Obispo Absalon construyó un castillo de piedra en 1167, y que más tarde se desarrolló como ciudad a través de una densa red de calles estrechas y edificios que se presentan como un mapa de la evolución a lo largo de los siglos.

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Christiansborg Slot
En la isla están algunos de los edificios más importantes de la ciudad, como Christiansborg Slot, versión del siglo XX del palacio construido alrededor de 1730 por el rey Christian VI. Es actual sede del Parlamento danés. En su Salón Real Audiencia hay una espectacular exposición sobre las excavaciones de la fortaleza original, o de la Kongelige Det Bibliotek (Biblioteca Real), la biblioteca más grande de Escandinavia.

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El centro de diversión y shopping, está en Strøget , la calle más famosa de la ciudad y tal vez la más larga del mundo, una zona peatonal desde 1962: desde aquí se ramifican plazas y calles pobladas de tiendas, cafeterías, restaurantes, así como muchos sitios históricos para admirar. En primer lugar está el Barrio Latino, que ocupa prácticamente el perímetro de la Universidad de Copenhague, un área en gran parte peatonal, en ambos extremos de la calle se encuentra Kongens Nytorv, el centro de la ciudad vieja, y Radhuspladsen el actual centro.

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Kongens Nytorv
Para hacer shopping de alta moda hay que ir a la Købmagergade, donde se encuentra también el Museo del Erotismo, Museo erótico, bastante pintoresco, pero también muy divertido. Siempre en esta zona el viajero tendrá la oportunidad de admirar el panorama de la ciudad: en la misma calle se encuentra la Rundetårn, o torre redonda construida en 1642 por Christian VI, el observatorio astronómico más antiguo en funcionamiento en Europa, con 35 metros de la altura. La belleza del panorama es una especie de recompensa porque para poder admirarlo hay que recorrer 209 metros de rampa en espiral.

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Rundetårn
La zona más caracter&i;stica es cerca a la costa, en el barrio de Nyhavn , la zona del puerto viejo, se colora de las típicas casas holandesas salpicadas de pintorescas habitaciones que invitan al cliente a sentarse y tomar un aperitivo con vistas al canal. Aquí cerca está Christiania. "la ciudad hippie" surge  a principios de los años setenta y sigue ahí, con sus colores divididos entre murales y mercadillos dispuestos a encantar a los clientes de todas las edades.

Otro lugar noto por todos es la plaza principal de la ciudad, Radhusspladsen, donde se encuentra los famosos Jardines de Tivoli, histórico y famoso parque de diversiones, y la Estación Central al sur-oeste. Pero una de las grandes riquezas de la ciudad es sin duda la oferta de museos: está el Ny Carlsberg Glypotek galería fundada en el año 800 por el magnate de la cerveza Carlsberg, Carl Jacobsen, que ofrece grandes colecciones de arte antiguo del Cercano Oriente y del Mediterráneo, un jardín con palmeras coronado por una cúpula de cristal gigante que alberga sarcófagos romanos y esculturas danesas, junto con obras de Monet, Pissarro, Renoir, Degas, Cézanne y Van Gogh, luego está el Frihedsmuseet, memoria de la resistencia danesa a los nazis, y la Kunstindustrimuseet, con sus refinadas colecciones de arte.

Por último Dinamarca sigue siendo una monarquía y por ello no podían faltar las residencias reales: en primer lugar está el Palacio de Amalienborg Slot, un complejo formado por cinco edificios en estilo rococó en un plaza de forma octagonal donde en el centro se encuentra el monumento ecuestre de Federico V. También encontramos el famoso  Rosemborg Slot edificado en el 400 en cuyo interior encontramos una gran colección de muebles extravagantes y alfombras pero sobretodo está rodeado de una exhuberante vegetación. Y por último está la Sirenita, símbolo de bronce que emerge de las aguas como homenaje del escultor Edvard Eriksen a la obra de un autor que se enamoró de esta ciudad, Hans Christian Andersen.

Rosemborg Slot
Copenhague es una ciudad con muchos lugares que visitar, un destino europeo donde disfrutar el encanto de lo antiguo que aún sobrevive en sus calles, donde la Sirenita da la bienvenida a los turistas, donde lo moderno e histórico son términos que encuentran su significado sólo fusionándose, para dar vida a una nueva palabra que se resume en Copenhague.