La ciudad de Verona debe gran parte de su notoriedad y popularidad como destino turístico a la Arena y al balcón de Julieta, pero su riqueza no termina con estos dos atractivos y hay muchos lugares para visitar. Veamos a continuación
qué ver en Verona, cómo pasar un fin de semana descubriendo el centro histórico en esta hermosa ciudad en Italia.
En pocas horas podemos tocar los puntos turísticos de la ciudad, pudiendo agregar otros puntos de interés en base a los gustos personales y a la estación. Si parte después de haber adquirido la Verona card ( un vale para dos días, cuesta 15 euros y permite la libre entrada a museos, monumentos y algunas iglesias), desde la Plaza Brá, una de las plazas más grandes y bellas de Verona, la sala de ingreso al centro histórico de la ciudad. Desde aquí se accede rápidamente a la Arena Romana: 140 metros de largo y 100 metros de ancho lo hacen el tercer anfiteatro romano más grande después del Coliseo Romano y el anfiteatro de Capua.
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La Arena - Verona |
A continuación veremos dos monumentos simbólicos: pasemos por la casa de Julieta donde encontramos el famoso balcón y la estatua en bronce de la muchacha.
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El Balcón de Julieta - Verona |
Luego se puede visitar la Piazza delle Erbe, rodeada de numerosos edificios lujosos, entre los cuales está el Palacio Maffei de estilo barroco, la Torre del Gardello y la Casa Mazzanti, con hermosos frescos. Para levantar el nivel de la visita se necesita subir hacia la Torre dei Lamberti, uno de los mejores puntos panorámicos de Verona.
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Piazza delle Erbe - Verona |
Para terminar la visita a la zona antigua o centro histórico, un tributo a los señores de Verona: Las Arche Scaligere, monumentos fúnebres que se levantan imponentes largo la Calle S. Maria Antica, y la fortaleza de Castelvecchio, a la que se llega atravesando el puente fortificado en ladrillos. Scaliger sólo de nombre dado que el actual ha sido reconstruido después de la destrucción total producida después de la Segunda Guerra Mundial.
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Arche Scaligere |
Para concluir con la visita en Verona, antes de ir de shopping y a disfrutar del arte culinario, dedique un tiempo al Teatro Romano y al museo arqueológico.
Foto: Giramondo