Evitar los Efectos de Muchas Horas de Vuelo

Cómo evitar los efectos colaterales de un viaje en avión

Los amantes de las vacaciones exóticas saben bien el precio que se debe pagar para llegar a los lugares paradisíacos viajes con interminables horas de vuelo y en algunos casos, fastidiosos problemas relacionados con la prolongada permanencia en el aire. Para hacer un viaje más placentero hoy le damos algunos consejos para evitar los efectos secundarios de muchas horas de vuelo

EL MAL DE AIRE

Un consejo para todos los que van a realizar viajes largos, pero sobretodo para quien sufre de mal de aire, avión  o mareos, no debe elegir cualquier asiento, la parte central sobre las alas, sacrifica un poco el panorama pero es dónde menos se sienten las turbulencias.
El jet - lag, el síndrome de cambio de huso horario puede contrarrestarlo antes de la partida, consumiendo solo comidas ligeras y evitando actividades extenuantes o que requieran mucha actividad física (deportes, noches de insomnio). Consuma goma de mascar eso contrarresta las náuseas, vértigos y también póngase algodón en las orejas.

ESTIRAMIENTO   Y EJERCICIO CONTRA LA INFLAMACIÓN

Los viajeros de clase turista tienen que lidiar con asientos demasiado estrechos y largos periodos de inmovilidad forzada. Por lo tanto, el dolor de las articulaciones y la hinchazón en las piernas son comunes. Para contrarrestar la retención de líquidos y estasis linfática en las piernas póngase de pie de vez en cuando y camine por el pasillo para estimular la circulación sanguínea y active el paso, el "bombeo linfático" que estimula la eliminación de líquidos. 
Haga también un poco de gimnasia estando sentado: rote los tobillos, contraiga y suelte rítmicamente los músculos de los muslos y las nalgas. Para encontrar un posición cómoda en el asiento, mantener el cuello y la espalda torcida, doblada. El estiramiento es esencial: para el cuello son útiles los movimientos circulares de la cabeza, mientras que para la columna es bueno arquear hacia delante y atrós la espina dorsal. 

HIDRATACIÓN

El aire comprimido del avión es el enemigo de la piel, que tiende a secarse e irritarse. Si quiere llegar a su destino fresco, en la mitad del trayecto le conviene beber mucha agua para evitar la deshidratación y extender  en su cara cada hora una crema hidratante intensiva. Prefiera también a lentes de contacto, las gafas para evitar el enrojecimiento, si es necesario, puede echarse unas cuantas gotas de lágrimas artificiales para lubricar la acción.


Foto: Come fare tutto