A lo largo de su existencia, la Arena fue el escenario de espectáculos populares y de entretenimiento, desde los juegos de caballeros hasta la competencia de toros en el 800´s. Sólo el 10 agosto de 1913, durante la realización de Aida con motivo del centenario del nacimiento de Giuseppe Verdi, su destino fue cambiado de forma permanente y la Arena di Verona se convirtió en el mayor teatro de ópera al aire libre del mundo.
Para aquellos que pasan sus vacaciones en un hotel en el lago de Garda, visitar la Arena o asistir a uno de sus magníficos espectáculos es sin duda muy gratificante y nada difícil, de hecho, los principales centros turísticos del lago están a menos de dos horas en coche de la ciudad de Verona.
Hoy en día, la temporada de ópera lírica es considerada como una de las más prestigiosas del mundo y alberga cada año a los mejores nombres de la ópera internacional.
La Traviata, Carmen y El barbero de Sevilla se cantan y actúan en el marco incomparable de las ruinas romanas. Para recordar los orígenes de la Arena, en la entrada a los espectadores se les regala una vela, y poco antes del inicio se apagan todas las luces y el público las enciende.
Nadie puede permanecer indiferente ante el espectáculo de la Arena iluminada por cientos de pequeñas velas.
En La arena de Verona no sólo se hacen presentaciones de ópera, a lo largo del año se celebran ballets de las mejores compañías internacionales, obras de teatro y conciertos de música moderna. Estrellas italianas e internacionales, como Vasco Rossi y Sting, han cantado en este hermoso escenario.
Se puede visitar la Arena de Verona todos los días desde las 8.30 hasta las 19.30, si desea mayor información puede consultar el sitio oficial.
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