Caral un hermoso destino turístico en Lima Perú , sobretodo si se realiza en auto. El camino hacia Caral por la famosa panamericana norte sorprende por sus hermosos paisajes y deliciosos destinos gastronómicos que lo esperan.
La ciudad sagrada de Caral fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el 2009. Es un atractivo turístico lleno de energía que se extiende hasta las playas, licores, comidas y los distintos lugares que hay para visitar a su alrededor.
Para llegar basta con recorrer 184 kilómetros de la Carretera Panamericana Norte y continuar 23 kilómetros adicionales por un camino afirmado hasta toparse con el maravilloso escenario, donde tendrá la oportunidad de conocer una de las civilizaciones más antiguas del mundo.
Una vez en rumbado por la carretera Panamericana Norte un grato olor lo guiará hasta la cafetería Delpino, ubicada hace más de 40 años en el kilómetro 77 y medio de dicha carretera, seduciendo al conductor todos los días del año, pues sólo descansa en navidad. Ahí se le abrirá el apetito al probar la suavidad de sus chicharrones (cerdo a la parrilla) y la sazón de unos buenos tamales (especie de torta de maíz o choclo) acompañados del mejor café de la zona, bebida ideal para abrir bien los ojos ante todo lo que le espera en el viaje.
En el kilómetro 83, sobresale un castillo medieval construido sobre un alcantarillado rocoso en 1936 por don Consuelo Amat y León Rolando, quienes después de un viaje por Europa decidieron edificar el hotel Villa Madre Perla, que hoy es símbolo turístico de la región. Conocido como "El Castillo de Chancay", ofrece, además de cuartos, una zona para acampar, restaurantes con distintas especialidades y un circuito turístico. Un dato para sorprender a sus hijos: suba al mirador europeo para divisar una parte de la historia peruana, pues una boya indica dónde yacen los restos de la goleta chilena La Covadonga, hundida el 13 de setiembre de 1880 en la Guerra del Pacífico.
Pocos kilómetros después, una maravillosa formación cultural única en el desierto costero nos regala las Lomas de Lachay y sus características neblinas. Esta condensación de nubes le da un aspecto místico al lugar y ayuda con el crecimiento de las 146 especies de plantas que crecen ahí.
Setenta kilómetros más al norte encontramos más al norte encontramos un paraíso poco frecuente. se trata de una formación de lagunas muy cercanas al mar, separadas por una brecha de arena, producción natural que es deleite para los ojo. Los Viños, playa con hospedajes y una zona para acampar.
En una brecha hacia el lado izquierdo lo espera un lugar romántico: La Albufera de medio Mundo. Existen pequeñas cabañas donde alojarse y paseos en bote. Si tiene tiempo emprenda un viaje de una hora por la laguna a la Isla del Amor, donde el silencio solo es interrumpido por el trino de los pájaros que migran hasta el lugar para anidar.
También puede tomar desde ahí un tour hacia la Isla Don Martín, donde encontrará un espectáculo de ronquidos y miles de aves jugueteando por los cielos. Gran cantidad de lobos marinos reposan sobre sus piedras blancas teñidas por el guano.
Después llegará a Barranca en donde podrá disfrutar de sus ricos desayunos y playas ideales para surfistas.
La ruta hasta Caral le ofrece además de lugares turísticos por visitar, balnearios hermosos, grandes olas, cabañas alejadas para descansar del ruido citadino, tragos y discotecas para no dejar atrás la vida nocturna.